Si la naturaleza tuviera su propio teatro, probablemente se vería algo así. Un escenario oscuro, luces de precisión casi quirúrgica y un elemento inesperado: un pequeño trocito de vegetación que, bajo este foco, se convierte en el protagonista absoluto.
Este proyecto es un juego entre lo real y lo artificial, entre la fragilidad de la naturaleza y la contundencia de la iluminación escenográfica. Aquí, la hierba no crece salvaje, crece con actitud, como si supiera que está siendo observada. Iluminada como si estuviera a punto de dar el discurso final en una película de ciencia ficción o de protagonizar la próxima campaña publicitaria de una marca que quiere ponerse filosófica.
Creado con 3ds Max, V-Ray y Photoshop, todo aquí está pensado para que los materiales y la luz jueguen su mejor papel. Desde la textura de la piedra hasta las gotas condensadas en el cristal, cada detalle suma a esta escena que, sin decir nada, parece tener algo importante que contar… o al menos, se ve lo suficientemente dramática como para que lo parezca.
Dirección creativa y visualización: Javier Hinojosa – JAVS hi visuals
PLANT OPERA — porque hasta la hierba merece un momento bajo los reflectores.